BEHAVIORAL SCIENCE · TOMA DE DECISIONES · PENSAMIENTO RELATIVO · PENSAMIENTO ABSOLUTO

El problema de las decisiones absolutamente relativas

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3 min readJun 14, 2022

Usted -en promedio- tiene entre 50.000 y 70.000 pensamientos diarios.

Toma cientos de decisiones al día.

Usted decide desde lo micro (cómo vestir esta mañana) hasta lo macro (apoyar el diálogo o apoyar las protestas).

Mientras más opciones tenga, más difícil será el proceso de toma de decisiones dice Katy Milkman -autora de “How to Change: The Science of Getting from Where You Are to Where You Want to Be” (2021)-.

Analizar las opciones se complica por los sesgos mentales. Por ejemplo Usted no hace un análisis de costo-beneficio ante la palabra “gratis”. Gratis es gratis.

Usted suele darle más peso a la gratificación inmediata que los beneficios diferidos. O Usted privilegia el malrato de una decisión ahora frente a las consecuencias futuras.

Digamos que a Usted le dan la opción (A) de recibir us$ 100 ahora; o la opción (B) de recibir us$ 120 en un mes.

Usted, ¿qué opción escoge?

(A)recibir us$ 100 ahora

(B) recibir us$ 120 en un mes

Un estudio de David Laibson -profesor de Harvard- demostró que la gente prefiere la inmediatez y disponibilidad de los us$ 100.

Pero 120 es más que 100.

¿Cómo tomar buenas decisiones?

Mina Mahmoudi -profesora del Departamento de Economía del Instituto Politécnico Rensselaer- presentó una nueva Teoría de Toma de Decisiones que explica porqué Usted toma decisiones adecuadas pero no óptimas.

Para tomar decisiones, Usted usa el pensamiento relativo y el pensamiento absoluto.

Resolver efectivamente algunos problemas económicos requiere que uno piense en términos de diferencias, mientras que otros requieren que uno piense en términos de proporciones”, dijo Mahmoudi en el documento “A Ratio-Difference Theory of Choice” (junio 2022).

El problema es que Usted puede aplicar incorrectamente los dos tipos de pensamientos. A menudo, Usted usa el pensamiento relativo cuando debería usar absolutos -y viceversa-.

Digamos que a Usted le dan la opción (A) de ahorrar us$ 5 de un producto que vale us$ 25; o la opción (B) de ahorrar us$ 5 de un producto que vale us$ 500.

Usted, ¿qué opción escoge?

(A) ahorrar us$ 5 en producto que vale us$ 25

(B) ahorrar us$ 5 en producto que vale us$ 500.

Estudios han demostrado que la gente prefiere ahorrar us$ 5 de un producto que vale us$ 25.

Ambas opciones generan un ahorro de us$ 5.

¿Por qué las personas prefieren la opción (A) de ahorrar us$ 5 de un producto que vale us$ 25?

Porque creen que están obteniendo un mejor trato. La relación 5/25 parece ser más conveniente que la relación 5/500. Es un ejemplo de pensamiento de proporción (“ratio thinking” en palabras de Mahmoudi).

¿El problema?

Usted puede tomar decisiones poco razonables que impiden maximizar los beneficios.

Si bien la nueva teoría se puede aplicar a una variedad de experimentos económicos, ¿podemos hipotetizar otro ejemplo de pensamiento de proporción dentro de la comunicación política?

Analizar la inseguridad en Ecuador desde la comparación de números relativos de muertes violentas por cada 100.000 habitantes en función de la población de Ecuador, México y Colombia.

¿El problema?

El problema de usar pensamiento de proporción en el caso de la inseguridad es que le resta criticidad al tema.

Reducir discursivamente ese estado crítico permite -a los otros- construir una narrativa de desconexión y ecpatía.

Ahora, ¿podemos hipotetizar un ejemplo de pensamiento absoluto dentro de la comunicación política?

Cerrar la jornada de protesta con la declaración “…mañana retomamos con más fuerza la lucha en las calles” es un postura absoluta.

¿El problema?

No da márgen de interpretación sobre las intenciones.

Reducir discursivamente las protestas a “lucha en las calles” permite -a los otros- construir una narrativa de sedición o coup.

Por cierto, hablar de emociones en la toma de decisiones era criticado.

Pero Leonard Mlodinow, en “Emotional: How Feelings Shape Our Thinking” (2022), dice que es imposible separar las emociones de la lógica racional.

Lo importante es entender cómo sus emociones impactan su toma de decisiones.

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Communications consultant, strategist & creator with a twist of behavioral science. En español!