BEHAVIOURAL SCIENCE · FICCIÓN · STORYTELLING
El pasado 15 de abril, en una sesión del Concejo de Quito, un concejal citó un superhéroe para argumentar la responsabilidad del poder.
“Como dijo Spiderman, un gran poder tiene una gran responsabilidad”
Y ardió la opinión pública.
No porque la atribución fuese incorrecta.
La crítica fue al uso de una frase de un superhéroe en una sesión municipal.
Por cierto, Donald Trump, en su discurso inaugural (2017), citó al súper villano Bane (enemigo de Batman).
“Estamos transfiriendo el poder desde Washington D.C. , y se las estamos devolviendo, a ustedes, la gente…”
“Gotham es suya. Y se las estamos devolviendo. A ustedes. La gente…”
¿Por qué el ruido a la frase del concejal?
- Obiter dictum: Expertos atribuyen la frase “un gran poder tiene una gran responsabilidad” a Stan Lee -escritor y editor de cómics y creador de Spiderman-. Otros se la atribuyen al presidente estadounidense Franklin D. Roosevelt. O a un documento de la Convención Nacional de Francia de 1793, que decía: “une grande responsabilité est la suite inséparable d’un grand pouvoir” (una gran responsabilidad es el resultado inseparable de un gran poder”). Por cierto, es bíblica (Lucas 12:48).
- Porque sólo creamos historias nuevas a partir de historias que ya conocemos, dice Nick Chater -profesor de Ciencias del Comportamiento- en “The Mind is Flat” (2018).
Lo importante -en realidad- es entender que los héroes (ficticios o no) son referentes en la cultura popular.
Lo importante es entender lo importante que es tener héroes.
Bertold Bretch -dramaturgo alemán- dijo “desgraciado el país que necesita héroes”.
Creo que necesitamos héroes entre nosotros. Y prefiero héroes como referentes; antes que antihéroes, monstruos o villanos.
Por cierto, los héroes están por debajo de los dioses pero por sobre los hombres, según Píndaro o Platón. Por sus habilidades y caracetrísticas idealizadas.
Le pregunto algo: ¿Sus referentes de hoy son los políticos o los futbolistas o los influencers?
¿Sus héroes son empresarios, emprendedores o activistas?
¿Personajes ficticios?
¿Cuáles son sus héroes y heroínas?
Creo que un héroe es como un meme -en la estricta definición de Dawkins en “The Selfish Gene” (1976)-. Porque ayuda a transmitir información cultural de manera interpersonal e intergeneracional.
La cultura es su memoria colectiva. Es la colcha de retazos de las historias, leyendas y creencias que explican quién es Usted, en qué cree, cómo es su comunidad. Y los héroes y heroínas -dentro de la cultura- son el caballo de Troya. Son el contenedor de los valores, principios, y visiones que Usted y su comunidad comparten.
Aunque esto es una hipótesis y “es un error capital el teorizar antes de poseer datos…”, decía Sherlock Holmes -el detective ficticio creado por Sir Arthur Conan Doyle-.
¿Qué sabría Holmes, si nunca existió?
Y la respuesta es que Holmes y Watson son reales. Como existen Hércules, Mujer Maravilla, Batman, Yoda, capitán Ahab, Martín Karadagián, Harry Potter, Ivanhoe, Lucy Pevensie, Emma Watson o Malala.
Existen porque su cerebro no distingue entre realidad y ficción.
Por ello también es real el profesor Moriarty.
Como lo son el Emperador Palpatine, Alex DeLarge, HAL 9000, Chuky, Gollum, Lex Luthor, Gordon Gekko, Lenín, Long John Silver, o el Conde Drácula.
Darth Vader.
Hannibal Lecter.
Joker.
El creador de Games Of Thrones decía que “en la vida, los monstruos ganan”.
Yo, sigo pensando que ganan los héroes. “Hasta el infinito… ¡y más allá!”
