BEHAVIORAL SCIENCE · COMPORTAMIENTO · NEUROCIENCIA · RELATO
Usted entra a un salón dónde hay varios desconocidos conversando. Luego de un instante de juntarse al grupo, Usted decide desconfiar del sujeto de la derecha pero siente que puede confiar en la joven de su izquierda.
En ese tiempo, ¿qué señales captó su cerebro que lo llevaran a desconfiar de la derecha? ¿qué significados ya existían en su imaginario personal que tuvo la corazonada de confiar en la izquierda?
Usted entra a un salón y su cerebro empieza a procesar cientos de datos: el color del salón, la decoración, el mood, la música, el olor a ambientador, la temperatura, las caras, ¿alguien conocido?, ¿alguien mal vestido?, ¿usted va bien vestido?, ese feo de la derecha no me agrada, hummm está bien la chica de la izquierda. Los estímulos empiezan a disparar asociaciones negativas o positivas basado en sus experiencias anteriores.
Pero Usted, ¿debe confiar rápidamente en lo que le dice su intuición?
Para comprar un auto pateamos las llantas, cerramos con fuerza la puerta y medimos la intensidad del apretón de manos del vendedor. Intuición.
Usted recibe, a través de sus sentidos, una cantidad de información detallada que su cerebro no considera al tomar decisiones porque es demasiada data para procesar.
Por ejemplo su retina -que convierte las imágenes que Usted ve en señales eléctricas y las envía por el nervio óptico al cerebro- envía unos 10.000.000 de bytes por segundo. Si Usted tuviese acceso consciente a toda es data a la vez, Usted no podría funcionar normalmente.
Su cerebro no se enfoca en los detalles de una escena sino en los significados que abstrae de las señales.
Digamos que Usted, su cerebro, se enfoca en el titular.
Para escoger un político analizamos su look, su reputación y su relato.
Los guiños, los gestos, las poses, las voces, los tonos, los silencios, las miradas, son armas de seducción en la Sociedad del Relato porque transmiten contenidos como los titulares de un diario o revista o tuit.
¿El problema?
En este punto el problema es que las redes sociales han convertido a los relatos en versiones simplistas y engañosas; y el pensamiento crítico no es su opción por defecto. El sesgo de confirmación si lo es.
En muchas situaciones Usted ha practicado usando su intuición y ha funcionado bien. Pero en una situación nueva, ¿qué tan informado está para decidir sobre esa nueva situación -digamos que debe evaluar si está bien o mal-?
Usted no debe confiar siempre en su intuición.
La intuición no es un predictor perfecto que vaticina el resultado correcto de una decisión / acción.
Volvamos al salón. Usted entra y hay varios desconocidos conversando pero Usted decide desconfiar del sujeto de la derecha porque es feo y prefiere confiar en la joven de su izquierda porque es guapa.
- Hay decenas de estudios que revelan una relación entre la belleza estética y los juicios morales.
- Otros estudios han revelado que las mismas áreas cerebrales se activan frente a la belleza estética y las buenas prácticas morales.
¿Confía en ella porque es estéticamente mejor que el sujeto de la derecha?
Su mecanismo de intuición (o de inferencia inconsciente) puede mejorar.
En “The Intuition Toolkit” (2024), Joel Pearson propone cinco reglas para mejorar su intuición: Use su intuición en contextos familiares y predecibles; no use su intuición si se siente emocional; use su intuición si se enfrenta una situación ya conocida; no use su intuición para juicios probabilísticos; y las adicciones e impulsos no son intuición.
En palabras de Pearson -neurocientífico australiano- Usted puede aprender a usar información inconsciente para una buena toma de decisiones.
La clave es tener algo de experiencia en la situación.
