EXPECTATIVA · REALIDAD · NEUROCIENCIA · COMPORTAMIENTO HUMANO
Si le digo “esto no le va a gustar”, entonces le va a gustar menos
Sus expectativas moldean sus experiencias.
Sus expectativas sobre lo que espera pensar y sentir ante un estímulo no sólo moldea su percepción (subjetiva) sino que cambia las respuestas neuronales de su cerebro.
Como dice el doctor Perry Wilson, autor de “How Medicine Works and When It Doesn’t” (2023), si un paciente toma píldora esperando una mejoría, aun si es una píldora de azúcar, el paciente va a mejorar. Pero si Usted le dice al paciente que la píldora le producirá nauseas, el paciente tendrá nauseas.
Un estudio de 2024, con salsa picante demostró cómo las expectativas influyen en las percepciones.
Unos voluntarios aceptaron probar unas salsas mientras escaneaban sus cerebros con una máquina de resonancia magnética funcional (fMRI).
Antes de probar la salsa, cada sujeto recibía un aviso. La imagen de un jalapeño cuando la salsa era “mild” y la imagen de dos jalapeños cuando la salsa era picante.
Aquellos voluntarios que odiaban el picante les desagradaba aun más cuando les advertían (con la imagen del jalapeño) que probarían la salsa “hot”.
¡Y aun no la habían probado!
¿Eso quiere decir que si Usted cree que algo no le gusta, por ejemplo la sopa de tomate, que le anticipen que va a tomar sopa de tomate intensificará su desagrado?
Las imágenes del fMRI mostraron que se encendía con más intensidad la vía neuronal “de la picantez” en los voluntarios que odiaban el picante… sólo con ver la imagen de dos jalapeños.
¿Eso quiere decir que si Usted creía que esta publicación era mala, cuando le dije que “no le va a gustar”, le gustó aun menos?
¿Esto se puede extrapolar a la política?
¿Eso quiere decir que si Usted cree que un candidato político le fastidia, entonces que le anticipen que lo va a escuchar intensificará su desagrado?
¿Si Usted siente que un candidato político le incomoda, entonces ver publicidad de ese candidato intensificará su incomodidad?
¿Si Usted espera odiar a una persona, entonces la va a odiar más?
Y si eso es así, ¿hay cómo revertir la situación?
“Cuando un miembro de un propio grupo político se muestra abierto a las ideas de un grupo político rival, ¿la gente premia esa apertura o la castiga?
En siete estudios con más de 5.000 encuestados, hemos descubierto que la receptividad hacia los adversarios políticos tiene costes de reputación. Cuando la gente es receptiva a opiniones contrarias procedentes de miembros del partido contrario, la receptividad resulta contraproducente.”
(Tomado de un post de Pablo Malo en X)
